Estimula el crecimiento radicular y promueve el desarrollo de la planta.

 Potencializador de fertilizantes químicos u orgánicos. 

Su alta capacidad de intercambio catiónico, maximiza la asimilación de nutrientes. 

Procura un pH equilibrado en el sustrato. 

Es una enmienda de la condición física y química del suelo. 

Mantiene niveles de humedad adecuados a la planta. 

Favorece la fortaleza y floración de la planta.